Amarse a uno mismo, es el inicio de un romance que dura toda la vida.

0
942

Seguimos preocupados en demasía por la opinión de los demás, tanto que muchas veces “tratamos de agradar”, quizás por simple amabilidad, quizás por un poco de inseguridad, quizás lo hacemos incluso sin darnos cuenta, pero el caso es que muchas veces nos negamos a nosotros mismos de alguna manera por “estar bien con los demás”, ya sea compartiendo opiniones que no nos terminan de convencer, o cambiando nuestra forma de vestir para “encajar mejor”, lo hacemos tan cotidianamente, tan involuntariamente que en ocasiones termina convirtiéndose en una manera de vivir.

Todos hemos visto aquellas personas que parece que tienen un ángel a su costado, parecen brillar y sobresalir no por ser buenos en algo específicamente, sino porque el trato con ellos simplemente fluye, son personas que te hacen perder la noción del tiempo, son gente que te da la sensación de que se puede confiar en ellos, algo tienen, algo que llama demasiado la atención, y lo más importante es que parece que lo hacen sin apenas esforzarse.

Aquello que tienen estas personas, que se les da de manera natural es sencillamente eso, que son naturales en su forma de ser, han dejado de centrarse en las modas, en los estándares de comportamiento, no por rebeldía sino por mera libertad, no carecen de errores o defectos, pero han aprendido a aceparlos como parte de ellos, y eso nos manda un mensaje subconsciente de que nosotros también debemos aceptar esos defectos como algo sin importancia, y de alguna manera lo hacemos.

No son personas más extraordinarias que tu o que yo, son simples individuos que si bien son buenos en algunas áreas en otras son como cualquiera, aquello que las hace resaltar tanto es una emoción dentro de nuestros corazones al encontrar una existencia legitima, alguien capaz de aceptarse a si mismo y de trasmitirnos ese mensaje a nosotros, ellos saben bien quienes son y no pretenden ser alguien más, no pretenden ser mejores o peores de lo que son, simplemente son y se aman así.

Es algo maravilloso encontrarse con esas personalidades tan peculiares, esas almas libres que aprendieron a seguir su propio camino, a pensar por si mismos, y que se dedican a existir con plenitud, no por la carencia de problemas, si no porque en todo momento son ellos mismos, por eso pienso que vale la pena darnos siempre un momento para la introspección, por eso creo que cuando se logra una relación así de buena eres la persona más afortunada del mundo, y no hablo de egolatría, hablo simplemente de la aceptación de uno mismo, del amor propio puro como debe de ser y sin condiciones, porque cuando eres capaz de aceptarte y amarte a ti mismo eres afortunada, porque encontraste un amor para toda la vida.

Autor: Chivy