Suelo ser de ese tipo de persona que planea todo, siempre tengo una expectativa sobre como quiero que sean las cosas y para lograr que sucedan de esa manera tengo un plan principal y algunos de reserva, la vida usualmente funciona de la misma manera en todos los ámbitos, desde la escuela, el trabajo y las amistades, digamos que se puede ir con una misma estrategia para sobrevivir en estas áreas de la vida, pero cuando te toca experimentar el amor, ahí todo se comienza a salir de control, ahí te das cuenta de que estas completamente indefensa, y que los planes que puedas hacer de poco valen a la hora de la verdad, porque estas ante algo que no puedes controlar por ti misma, estas ante algo que incluso te impide razonar de la manera en que normalmente lo harías.
Cuando te conocí creí que podría manejar las cosas de tal forma que encajaran en mis planes personales, en mis fantasías y en la forma en la que quería que fuera el romance perfecto para mí, ¡oh gran sorpresa me lleve!, pues me di cuenta de que la realidad se me escurría por las manos, que mientras más trataba de mantener el control, más se me escapaba todo de mi propio alcance, y durante un tiempo seguí intentando hacer que las cosas funcionaran como yo quería, hasta que comprendí que era imposible, hasta que me resigne y entendí que el amor es como es, que no por eso es mejor o peor, el amor no puede controlarse o darle forma, al amor se le acepta o se le aleja, pero no puedes hacerlo a tu manera.
Así que con todo el miedo que conlleva lanzarse a una relación sobre la cual no tienes ninguna especie de control o garantía, y que además puede hacerte un daño inmenso, decidí seguir avanzando contigo en esta aventura desconocida para mi, en esta historia de la cual desaparecieron todas mis expectativas y solo quedo una enorme ilusión de que todo saliera bien, de esta forma comenzaron a llegar nuestras primeras pruebas juntos, algunas más sencillas que otras, y cabe destacar que no en todas nos fue muy bien, hubo momentos en los que tu o yo, o quizás ambos queríamos terminar con esto y decir adiós.
Pero una fuerza extraña nos hizo permanecer juntos, y en cada prueba que superábamos se reforzaba la idea de que éramos el uno para el otro, y que estábamos destinados a permanecer juntos de ahí en adelante, y es que incluso en medio de los peores problemas que tuvimos yo no deseaba estar en ninguna otra parte sin ti, creo que lo mismo sentías, creo que de alguna manera fuimos capaces de reconocer aquello bueno que el otro tenía, fuimos capaces de valorarnos lo suficiente como para no rendirnos cuando todo iba mal, porque en el fondo sabíamos que era algo temporal, y que todo pasaría.
Lo nuestro ha sido mi mejor historia, y aunque estuvo muy lejos de ser lo que yo imaginaba, y a pesar de todas las equivocaciones y errores que cometimos en el camino, puedo decir sin lugar a dudas que para mí fue perfecta.
Autor: Sunky