A pesar de que siempre es agradable escuchar algún alago, alguna buena critica con respecto a nosotros, la realidad es que no las necesitamos, la verdad es que podemos vivir sin ellas por completo, porque es más infeliz aquel que tiene el aparente respeto de los demás pero ha perdido el propio, que aquel que se respeto por sobre todas las cosas y es feliz con sus acciones a pesar de los señalamientos de los demás, a pesar de que le consideren un tonto o un loco, las personas que son coherentes entre lo que piensan, dicen y hacen son más felices que las demás, y es que no debemos olvidar que podremos tener compañía la mayor parte del tiempo, pero ninguna que este tanto como nosotros mismos.
Es también en la misma medida en la que buscamos nuestros propios ideales que el respeto por uno mismo crece, cuando nos enfrentamos a las adversidades y actuamos de la manera en que creemos que es la mejor nuestro amor propio se fortalece y le pese a quien le pese, en la medida en la que uno mismo se ama y se respeta los demás lo harán también, es por eso que es muy importante el saber elegir bien las amistades y aquellas personas que dejamos entrar en nuestras vidas, porque si elegimos a las personas correctas no tendremos que preocuparnos por complacerlas, no tendremos que preocuparnos por su opinión ya que no nos la darán a menos que se la pidamos, el respeto por las demás personas comienza en saber aceptar las diferencias y en no meterse en la vida del otro a menos de que te lo pidan o sea completamente necesario.
De cualquier forma no podemos decidir la totalidad de la gente con la que terminamos relacionándonos, porque ya sea por trabajo o por la escuela o por cualquier otra actividad nos terminaremos encontrando con personas que se dediquen a señalarnos y es ahí donde tendremos que poner a prueba nuestra capacidad de ignorar los comentarios que no hemos pedido, tendremos que borrar de nuestra mente aquellas ideas que tratan de implantarnos todas esas personas ajenas a nosotros, que no nos conocen, que no saben por lo que hemos pasado, pero que hablan como si fueran dioses capaces de juzgarlo todo, aunque se olvidan de mirar sus propios fracasos, y tristemente también encontraremos personas así en nuestra propia familia, por eso mismo es tan importante que aprendamos a tener un buen criterio sobre a que personas realmente les importamos y cuáles no.
A final de cuentas aun siendo familia todos terminaremos separados, cada uno hará su vida por su lado, y la única persona que nos acompañara hasta el final de nuestros días seremos nosotros mismos, por eso nunca te defraudes por agradar a nadie, por debes siempre de defender tu ideología ante cualquiera que quiera hacerle daño, y si no eres capaz de hacer entender a las personas el porque de tus actos, o simplemente no te interesa perder tu tiempo tratando de justificarte simplemente ignóralos, no trates de influir en aquellos a los que no les interesas en realidad, porque la mayoría solo te criticaran por hacerte daño o por diversión, no porque quieran ayudarte en verdad, aprende a ignorar y serás más feliz.
Autor: Sunky