No lloro, pero me duele. No te busco, pero te extraño.

0
12023

Dicen que después de muchas decepciones el corazón se va cerrando, que nos volvemos de hielo, que dejamos de sentir, quizás es el proceso que estoy viviendo, quizás estoy a punto de volverme una mujer de piedra, y es que tengo la sensación de estar entumecida por completo, mi cuerpo ya no reacciona como normalmente lo haría a los sentimientos que tengo, porque a pesar de sentirme triste y sentir un dolor en el pecho las lagrimas ya no son capaces de brotar de mis ojos, o quizás sea que he llorado tanto que mis ojos se secaron por completo, quizás mi cuerpo se niega a seguirme este juego en el que cada vez de destruyo más y más a mi misma, quizás se ha puesto en huelga hasta que no sea capaz de darle forma a todos mis sentimientos y pensamientos.

 

Cada vez que conozco un nuevo prospecto en mi vida trato de asegurarme de que sea diferente por completo de aquellos que he conocido en el pasado, de aquellos que me dejaron claro que nada valían, de aquellos que me hicieron tanto daño, cada una de mis historias han comenzado de formas completamente distintas, con distintos tipos de hombres y sin embargo, todas han terminado de la misma forma con estas personas traicionándome, y tengo que preguntarme si acaso no será culpa mía, porque ya me resulta demasiado extraño que pueda tener una suerte tan mala en realidad, me cuestiono si de alguna manera no seré yo quien les termina orillando a irse a los brazos de otra, y me atormenta no encontrar respuesta que satisfaga a mis preguntas, me da miedo creer que pueda ser yo la causa de todo el dolor que me han infligido los hombres de mi pasado.

Por otro lado me pregunto si no estaré de alguna manera tratando entonces de justificarles para convencerme que no todos eran tan malos, y con esto romper la idea que tengo ahora mismo de que todos los hombres son iguales, que todos son unos traicioneros, unos viles que solo te buscan por un tiempo, unos mezquinos capaces de mentir y seguir mintiendo todo lo necesario hasta lograr enamorarte, hasta terminar convenciéndote para que confíes en ellos, y entonces puedan obtener aquello que realmente buscaban, y una vez satisfecha su curiosidad olvidarse de ti lo antes posible para salir en busca de una nueva conquista, quizás quiero culparme de forma voluntaria para creer que no todos son unas horrendas personas, y tener entonces yo  algo de culpa y al mismo tiempo esperanza.

Pero mientras todas estas contradicciones me asaltan sin parar, mi cuerpo se ha quedado en estado vegetal, ya no reacciona, ni se asusta, ni llora, ni se alegra, ni se conmueve, quizás esta cansado de sentir, quizás todo mi cuerpo se resiste, y el único necio que no entiende, que no se rinde es mi corazón, que a pesar de haberle pedido mil veces que no se vuelva sobre sus pasos, que no siga mirando sobre los fracasos del pasado, no da su brazo a torcer por completo y sigue muy a mi pesar extrañándote a pesar de que ambos sabemos que no te lo mereces.

Autor: Sunky